por protervidad
Carta n° 1
La porcelana en los labios contempla la ausencia
palabra-morir
y ensordecerme a la evocación del amparo animal que cubre el misterio dentro de mi cuerpo.
Desespero la madrugada,Abro el poema para introducirme sacrificada en él.
Amanecer en la musicalidad ancestral de tu lenguaje bóveda-yaciente.
Y al volver escupimos plumas, de pájaros mojados.
Abrazo(s)
Abrir un poema en canal e introducirse en él es como una introducción al suicidio. Y ya adentro estaremos cubiertos de baba y de algas que han fallecido en sus mares caspios. Tratemos de ver al poema desde afuera, como si fuese una criatura enferma que necesita en forma urgente una dosis de paz. Ahí estaremos, codo a codo con las esperanzas. Y si todo va mal, bueno, cerraremos los ojos en silencio. Casi vivir indavertidos.